Necesito descargar aquí algunas zozobras que tengo en clase, además de las emociones que me han recorrido en los últimos tiempos. Puede que esté afectada por mi propio cambio en el enfoque de las clases. Ayer, en mitad de la clase, me asaltaban las dudas: ¿Vuelvo a los ejercicios de rellenar huecos como forma de práctica? -No es que los haya desechado, es sólo que ahora los utilizo como último recurso. Ya no son lo primero que hago después de dar una explicación gramatical.
Creo que en mis últimas clases me olvidé de que mis alumnos solo estudian español en las horas que asisten a clase, ya está. Después, nada. Se me olvida, a veces, que ellos también tienen que cumplir con su parte del compromiso, pero cuando veo esas caras de estupefacción nada más entrar por la puerta... No sé, me asaltan las dudas: ¿Les pondré ejercicios muy difíciles? ¿Las clases que planifico son realmente tan difíciles? Por los resultados, yo diría que no porque siempre resuelven los ejercicios bien. Muchas veces tengo la sensación de que acuden a clase derrotados. ¿Por qué pienso esto? Por los comentarios que hacen. Ayer, un alumno me dice que vemos mucho vocabulario en clase. No es cierto, porque, realmente, todo el vocabulario que vemos es una repetición del visto anteriormente más, por supuesto, algo nuevo. El problema, creo, es que lo que ha cambiado es el contexto y la situación temporal de ese vocabulario. Es decir, el verbo casarse es casarse en presente, en pasado y en futuro; es un verbo que conocen, pero parece que al verlo en pasado ha cambiado. Apunte: Un alumno me dijo ayer que con aprender una palabra a la semana era suficiente -¿qué puedes contestar a eso? Pues, que es demasiado poco, ¿no?-. Por lo menos, una al día, le dije yo.
Otras preguntas que me asaltaban: ¿Entenderán el porqué de la clase? ¿Serán conscientes de porqué hacemos estos ejercicios? En los últimos tiempos les digo porqué hacemos este o aquel ejercicios. Por ej. ayer les dije que íbamos a repasar el vocabulario visto hasta ahora.
Por lo menos, ayer, el par de alumnos suecos que tengo me dijeron que estaban contentos porque se iban a casa con muchas dudas que tenían resueltas. Eso es un consuelo.
Ahora que sé que estoy en el camino reflexivo, tengo que ser consciente de que los cambios y las dudas estarán conmigo siempre. No hace mucho he leído que el aprendizaje supone para el individuo un cambio personal y creo que eso es lo que estoy experimentado en las clases. Yo aprendo a enseñar enseñando y eso anda provocando modificaciones en mi forma de estar en clase, de enfocarla, de ver a los alumnos y de ver la vida :). Es curioso esto de ser el espectador de tu propia evolución.
Algunas impresiones en clase...
sábado, 5 de mayo de 2007Publicado por Mª Isabel González Martínez en 11:22
Etiquetas: comentarios, observación clases, preguntas de alumnos, reflexión docente